
La gorila Bua Noi ha pasado la mayor parte de su vida encerrada en una jaula en un centro comercial en Bangkok, Tailandia. Llegó a ese zoológico desde Alemania en 1992 cuando tenía tres años (ahora tiene 30), y desde entonces nunca ha salido de su encierro. En unas imágenes desgarradoras captadas la semana pasada se puede ver al animal desconsolado arrancándose el pelo frustrado y moviéndose ansiosamente por la jaula. Bua Noi debía haber sido liberada hace años, algo que nunca llegó a ocurrir.
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