
El pasado 8 de septiembre durante una carrera del Lamborghini Super Trofeo disputada en el circuito de Laguna Seca (California, EE.UU.), una piloto sufrió un aparatoso accidente cuando su superdeportivo chocó de frente contra una de las barreras de contención. Sheena Monk, del equipo Wayne Taylor Racing, intentaba adelantar a dos rivales a la altura de una curva conocida como 'sacacorchos'. Y aunque logró superarlos, su vehículo iba a 200 kilómetros por hora y al momento de afrontar el peligroso giro no logró disminuir su velocidad e impactó contra varias filas de neumáticos. El bólido giró en el aire y terminó destrozado.
Deja tu comentario